EL VENEZOLANO COLOMBIA
La crisis migratoria en el Darién, la frontera natural entre Panamá y Colombia, ha generado tensiones entre ambos países. Panamá acusa a Colombia de falta de colaboración en el cierre del tránsito de migrantes irregulares por la peligrosa selva del Darién.
La situación ha llevado a una migración descontrolada, afectando la seguridad y la situación humanitaria en la región.
Analizamos las denuncias de Panamá, el creciente flujo de migrantes y las preocupaciones sobre aglomeraciones y riesgos sanitarios.
Falta de colaboración en el cierre del tránsito migratorio
Panamá denuncia que Colombia no está cooperando en el cierre del tránsito de migrantes irregulares por la selva del Darién. A pesar del anuncio de Estados Unidos de cooperar con gobiernos regionales para reducir el flujo de migrantes hacia Norteamérica, Colombia sigue permitiendo el paso de personas hacia la selva, generando un creciente flujo migratorio hacia Panamá.
Crisis humanitaria y de seguridad en el Darién
El flujo masivo de migrantes irregulares por el Darién ha provocado una crisis humanitaria y de seguridad en la región. Panamá ha recibido un alto número de migrantes en condiciones precarias, lo que ha puesto a prueba sus recursos y capacidad para atender a esta población vulnerable.
Negocio millonario de grupos organizados en Colombia
Según Panamá, la migración irregular por el Darién se ha convertido en un negocio millonario para grupos organizados del lado colombiano. Los migrantes pagan grandes sumas, alrededor de 1.000 dólares, para cruzar la selva en su camino hacia Norteamérica. Esta situación ha llevado a la necesidad de tomar decisiones de alto nivel para cerrar este negocio ilegal.
Esfuerzo y recursos invertidos por Panamá para atender a los migrantes
Panamá destaca que es el único país que invierte esfuerzo y dinero en atender a los migrantes que cruzan el Darién. Han invertido más de 65 millones de dólares en asistencia de alimentación y salud para esta población, que llega en condiciones precarias y al borde de la moribundez. Sin embargo, otros países por donde pasan los migrantes no han mostrado el mismo compromiso.
Preocupaciones sobre aglomeraciones y riesgos sanitarios
Además de la falta de colaboración de Colombia, Panamá expresa preocupaciones sobre la situación en Costa Rica. Las autoridades de Costa Rica han solicitado medidas para disminuir el flujo migratorio en su frontera, lo que podría generar aglomeraciones y problemas en territorio panameño. También se alerta sobre riesgos sanitarios y el impacto en la población local debido a la falta de condiciones sanitarias adecuadas por parte de los migrantes.
La falta de colaboración por parte de Colombia en el cierre del tránsito migratorio por el Darién ha generado una crisis humanitaria y de seguridad en Panamá. El creciente flujo de migrantes irregulares ha llevado a una migración descontrolada y a una sobrecarga de recursos para atender a esta población vulnerable. Panamá ha invertido esfuerzo y dinero en la asistencia de los migrantes, pero también se enfrenta a preocupaciones sobre aglomeraciones y riesgos sanitarios debido a medidas solicitadas por Costa Rica. La cooperación entre los países de la región es fundamental para abordar esta crisis migratoria de manera efectiva y humanitaria.