EL VENEZOLANO COLOMBIA | AVILA MONSERRATE
¿Eres venezolano? ¿Vives en Bogotá? ¿Extrañas tus sabores? En Antójate Venezuela-Colombia encontrarás la solución a tus problemas. “Un pedacito de Venezuela en el corazón de Colombia” es su lema, y le hacen honor. También le hacen honor a su nombre, porque en esta tienda se puede, verdaderamente, “matar los antojos”.
En febrero de 2020 llegaron a Colombia Leonardo Suárez y Belkis González, ambos caraqueños, quienes decidieron trasladarse a Bogotá porque la empresa para la que trabajaba Belkis —y sigue trabajando—, una subsidiaria de Falabella, transfirió su sede a la capital colombiana. Leonardo, por su parte, trabajaba como gerente de compras en una fábrica de pan. En Bogotá ya se encontraba una amiga de la universidad quien tenía un emprendimiento llamado Antójate Venezuela-Colombia, que se vio obligado a cerrar con la llegada de la pandemia de Covid-19.
Leonardo y Belkis, compraron la marca a su amiga, hicieron un relanzamiento y como parte de su estrategia comenzaron a asociarse con otros emprendimientos, también venezolanos: Chop Colombia, que ofrece charcutería con sabor criollo: chorizo carupanero, morcilla y chuleta ahumada, entre otros; Picantes Bachaca, que venden salsas y picantes; Lácteos Carora y Lácteos Zulia, que producen los quesos frescos típicos venezolanos que tanto se extrañan en el extranjero: guayanés, de mano, de trenza, duro y palmito. Estos deben solicitarse por encargo.
FRESCOLITA …
Dentro de su lista de productos ofrecen también los tan queridos y anhelados chocolates venezolanos: Toronto, Samba, Ovomaltina, Galak, Toddy y el clásico chocolate con leche Savoy (Nestlé), entre otras delicias, que al probarlas hacen recordar el terruño. También expenden bebidas y licores con sello venezolano: la Maltín Polar —el producto más vendido de la tienda, según Leonardo— y la refrescante Frescolita. Entre las bebidas con alcohol se puede conseguir el Ponche Crema de Eleodoro González P., la Polarcita, Sangría La Caroreña, Anís Cartujo y, por supuesto, el ron, en este caso Santa Teresa, muy buscado y apreciado por los clientes colombianos.
La lista incluye también productos colombianos e importados, como otros licores, jamones, productos enlatados, encurtidos, snacks. Además de los alimentos, tienen una sección de artículos como tazas, delantales, camisetas y popsocket, con diseños de la marca Ana Limón, alusivos a motivos venezolanos —marcas comerciales, equipos de béisbol, ciudades del país— los cuales se pueden personalizar.
Cuenta Leonardo que —con frecuencia— parejas conformadas por ambas nacionalidades visitan la tienda para probar la malta, buscando comparar su sabor con productos similares locales.