Los envíos de petróleo desde Venezuela a Cuba continúan en aumento aunque dentro de la Isla no se perciban los arribos y las largas filas en las gasolineras sean cada vez más frecuentes. En octubre pasado, según documentos de Refinitiv Eikon y la estatal venezolana Pdvsa revisados por la agencia Reuters, Caracas exportó a La Habana 66.000 barriles por día (bpd) de crudo y productos refinados, 8.000 más que un mes antes mientras que en agosto solo fueron 40.000.
Pese al incremento de entregas, la Isla vivió varios días de escasez de combustibles en octubre. Las colas de vehículos en los servicentros se repitieron en varias ocasiones y en las paradas de ómnibus, la larga espera ha sido la constante en las últimas semanas por la inestabilidad del transporte público. El transporte privado no ha sido capaz de absorber todo el exceso de pasajeros y los taxis particulares pasan llenos ante clientes que insisten con el brazo levantado.
La reducción de las frecuencias de los ómnibus estatales no ha sido informada por el oficialismo, pero la falta de combustible es, mayormente, el principal problema que afecta el servicio. Además, como parte de las medidas por el descenso de contagios de covid-19, desde este 1 de noviembre el Gobierno decidió restablecer el transporte masivo en todo el país, lo que se traduce en un mayor gasto de gasolina y diésel.
El transporte privado no ha sido capaz de absorber todo el exceso de pasajeros y los taxis particulares pasan llenos ante clientes que insisten con el brazo levantado
En octubre, Venezuela exportó un promedio de 711.193 barriles por día lo que representó un incremento del 76% en comparación con un mes antes, cuando la falta de diluyentes obligó a Pdvsa a recortar la producción y la mezcla final de hidrocarburos, recoge Reuters.
El incremento de exportaciones se debe a que la región petrolera más grande de la nación sudamericana ha recuperado poco a poco su producción gracias al impulso de Irán, uno de los aliados más importantes del país, que comenzó a suministrar condensado para diluir el petróleo extrapesado proveniente de la Faja del Orinoco.
A cambio del primer envío de condensado, Teherán recibió dos millones de barriles de crudo pesado. Los documentos registran que en octubre se despacharon 30 cargamentos de petróeo y productos refinados, y muchos de los envíos tenían como principal destino Asia. La ayuda iraní continúa este mes con un segundo embarque que ya arribó al país sudamericano.
Para Cuba, el envío de tanqueros con petróleo desde Venezuela responde a la estrecha colaboración que mantienen ambos países desde la llegada al poder de Hugo Chávez, en 1999. El flujo del crudo promedió 90.000 bpd hasta 2016, y desde entonces ha disminuido producto de la baja producción venezolana y las sanciones de Estados Unidos. El Gobierno estadounidense acusa a La Habana de sostener con inteligencia y tropas al régimen de Maduro a cambio de combustible.
