EL VENEZOLANO COLOMBIA
Por: Nora Sánchez
A Necoclí, región del Urabá antioqueño, el gobierno de Colombia le busca solución tras una crisis migratoria seria producto de la llegada de cientos migrantes haitianos y africanos.
Para avanzar en esa ruta, el próximo 5 de agosto el Gobierno se reunirá la Comisión Intersectorial Contra el Tráfico de Migrantes para discutir un plan de acción con el fin de ejecutar acciones de apoyo a la localidad.
Así lo informó el director general de Migración Colombia, Juan Francisco Espinosa, quien destacó que el equipo técnico operativo para la coordinación y orientación de las asociaciones que se adopten contra el tráfico de migrantes dará respuesta a la situación en la que se están inmersos al menos 9 mil migrantes.
Necoclí es uno de los once municipios que forman parte de la de subregión de Urabá, localizado en el departamento de Antioquia.
COOPERACIÓN INTERNACIONAL
Los recursos limitados con los que cuenta el municipio de Nicoclí para atender la crisis migratoria, obliga al gobierno de Colombia a generar un marco de cooperación internacional que les permita afrontar la problemática.
Espinosa recalcó que Colombia no es responsable de la situación en Necoclí y ante la crisis que ha generado la migración, tanto para quienes llegan a esa localidad esperando seguir su camino hacia Norteamérica, como para quienes habitan en la localidad, están buscando mecanismos de protección de los migrantes.
EL NARCOTRÁFICO SE APROVECHA
Alrededor de esta migración haitiana y africana que tiene colapsado al pueblo de Necoclí, hay una estructura de tráfico de migrantes que se deriva en trata de personas, así lo dijo Juan Francisco Espinosa.
Sobre el asunto informó que han detectado situaciones de uso de narcotraficantes de población para movilizar pequeñas cantidades de droga hacia Norteamérica, “lo cual ha generado alertas, ya son casi 200 capturas realizadas para contrarrestar la trata de personas y el tráfico de migrantes que se presenta con población vulnerable”, aseguró.
NÚMEROS ALARMANTES
Según Migración Colombia, lo que ocurre en Necoclí es un fenómeno recurrente e histórico el cual tiene picos estacionales, ya que en las épocas de invierno en el Norte, la migración disminuye considerablemente.
Frente a este escenario, el gobierno de Colombia trabaja en la aplicación de medidas de sostenibilidad para administrar esa crisis a través de trabajo colectivo con países como Panamá y Ecuador, “de manera tal de que arrebatemos estos seres humanos de redes de traficantes de migrantes o de explotadores”, planteó Espinosa.
A pesar de la pandemia por el Covid-19, este año la migración en Necoclí presenta números alarmantes y según el director de Migración Colombia, más de 25 mil migrantes que han pasado por esta zona son irregulares, ya que las fronteras han permanecido cerradas por largos periodos, pero entran por puntos informales o las llamadas «trochas».
Las autoridades estiman que entre 800 y 900 personas por día llegan a Necoclí.
Sin embargo, y aunque los números no pueden ser precisos por las entradas ilegales, hay quienes aseguran que en la localidad del Urabá antioqueño hay al menos 10 mil migrantes.
CONTENIDO RELACIONADO: