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Sabine Bouwmeester es una joven holandesa que desde hace más de dos años le enseña inglés a niños y jóvenes de la Comuna 3 de Medellín a través de la Fundación Caminos.
Sin embargo, la joven se vio obligada a regresar Ámsterdam, luego de que la Cancillería de Colombia le negara la visa de visitante, a pesar de que ella llevaba varios años viendo en la capital del departamento de Antioquia. La denuncia la hizo el periodista Yamid López, quien contó detalles de esta historia que perjudica los servicios comunitarios que valiosamente prestan los extranjeros en el país.
“La Cancillería le negó la visa de visitante, sin ningún motivo, a Sabine Bouwmeester, compañera de trabajo en Fundación Caminos y quién, con un esfuerzo tremendo, entregó más de 4 mil mercados a las familias más pobres de Medellín durante la pandemia”, escribió el periodista.
Según cuenta López, Sabine es la responsable de buscar recursos para la Fundación a nivel internacional y también es profesora de inglés de más de 50 jóvenes en los barrios Bello Oriente, Carambolas y Carpínelo de la comuna 3 de la ciudad.
De hecho, en noviembre de 2020, la Asamblea Departamental de Antioquia la condecoró con la orden al mérito Jorge Robledo, máxima distinción en Antioquia. La Fundación, gracias a su gestión, atiende a 450 beneficiarios con proyectos como fútbol, inglés, periodismo, entre otros.
“Durante la cuarentena, Sabine buscó recursos, especialmente de Holanda, para atender a los beneficiarios de la Fundación. La mayoría de las familias de la comuna trabajaban como informales, cuenta propia. Se había quedado sin recursos. Gracias a Sabine, no se quedaron sin comida”, escribió el periodista.
Como parte de su estadía en Colombia, Sabine realizó las diligencias necesarias para pedir la visa pero el 19 de enero la Cancillería le informó que le fue negada. Ahora la holandesa debe esperar 6 meses para hacer nuevamente la petición.
Tras recibir la negativa de su visa, el camino que le quedaba era salir del país y tomó el primer vuelo para Ámsterdam. Pero esta decisión pone en jaque el trabajo de la fundación y del trabajo que venía adelantando la joven con la población vulnerable de Medellín.
Piden que la Cancillería evalúe nuevamente la solicitud de visa que solicitó esta holandesa y que pueda seguir con sus actividades sociales.
En su discurso de condecoración, expresó: “Queremos que los niños salgan adelante y que las familias los sepan aprovechar. Queremos más equidad para que estos niños de estrato uno tengan la oportunidad e cumplir sus sueños”.
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