EL VENEZOLANO COLOMBIA | FILIPPO CAMPISI
Es una fortuna vivir en Latinoamérica, no importa que tan grande sea la ciudad en donde vivamos o visitemos, siempre vamos a encontrar la puerta de una casa abierta con una mesita en frente y una familia ofreciendo algo típico que ha pasado por generaciones.
Una buena forma de conocer un lugar al que nunca fuiste es a través de la cocina y sus sabores, podemos entender un poco más como es su gente. Para mis los puestos ambulantes son siempre la propuesta más atractiva. El contacto es directo y la preparación es en vivo, la comida sabe mejor y se vuelve toda una experiencia. Puedes ver el orgullo que sienten por algo que han preparado cientos de veces y claro, siempre te dirán que su puesto es mejor que ninguno.
De la Costa Caribeña a los Andes llega María Angélica con su @sabordepalenque, Cartagenera, sonreída y respetuosa de su herencia culinaria. Cuando llegas a su puesto en la fría Bogotá sale el sol. María Angelica lleva su negocio de comida típica de la costa, prepara empanadas, carimañolas, arepas de huevo, trifásicas, arepa dulce, jugo de corozo y otras delicias.
La sazón principal de su comida lleva tradición, orgullo, amor, técnica y mucho trabajo. Aclara que sus alimentos están hechos solo con maíz fresco. Mientras atiende los pedidos y saluda a sus clientes vigila sus frituras con seriedad. Actualmente vive en Barranquilla por la situación, pronto volverá a la capital colombiana para seguir deleitándonos con sus sabores.
Algunos subestiman este tipo de negocios por lo modesto del lugar o lo simple que parece la comida, pero la realidad es que la preparación y logística son a veces más complicadas que la de en un establecimiento fijo.
RECETA PARA HACER UNAS DELICIOSAS AREPAS DULCES
Harina de maíz pre cocida
Azúcar, tú decides cuan dulce la quieres, yo puse como 4 cucharadas para 6 arepas
Anis 1 cucharada
Agua tibia c/n
Pizca de sal
Colocas la harina, el azúcar, la sal y agregas el anís frotándolo entre tus manos para activar el olor. Agregas el agua y amasa hasta obtener una textura suave. Busca una bolsa y un plato para aplanar las arepas, deben quedar delgadas. Haz un hueco en el medio y fríe en abundante aceite. Cuando la arepa flote debes bañarla con el mismo aceite caliente para que empiece a inflar. Apenas estén doradas retira del calor y sirve.